Llamamos verdeo a la recolección de la aceituna destinada a aperitivo de mesa. Se realiza durante el otoño, cuando la aceituna está aún verde, de ahí su nombre. Dependiendo de la producción del olivo, la aceituna puede acabar antes negra.
Históricamente se recogía a mano con la única ayuda de varas. El vareo consistía en golpear las ramas del olivo para que el fruto se desprendiera y lo recogieran los jornaleros del suelo (mujeres habitualmente). Existen ánforas griegas que ilustran un trabajo durísimo tanto para el trabajador como para el árbol, que en ocasiones sufría daños que afectaban a las siguientes temporadas.
La alternativa era el ordeño a mano o con peine. Es mucho menos dañina para el olivo, pero requiere mucha mano de obra. Durante los años 60 empezaron a llegar los primeros avances tecnológicos basados en la vibración, bien sea del árbol o de rama (véase el vibrador de mano o el vibrador de tractor) desde otros países productores como Italia.
Todas las aceitunas de nuestros productos se recogen con el método tradicional del ordeño a mano para preservar intactas las cualidades del fruto y del árbol.
MAESTROS ACEITUNEROS
De los 60 a la actualidad existen otras máquinas basadas en la vibración que reducen todavía más el posible daño al olivar. Cosechadoras cabalgantes, peines eléctricos y nuevos sistemas de recogida desde el suelo mucho más eficientes.
A todo esto se suman las técnicas de planificación agraria en cuanto disposición de la planta, su regadío, la medición meteorológica y análisis en detalle.